A dormir

Acompaño a mi hija a conciliar el sueño, sí. La guío con palabras susurrantes, a respirar, a relajarse, a dejarse llevar por el peso de sus párpados... El caso es que a mí también me relaja, me induzco a un estado de profundo sosiego y en ocasiones se me ocurren cosas. Un día pasé lista de algunas personas de mi círculo íntimo, del cercano, del periférico, etc. Una de las personas la identifiqué sin querer con un animal, con una jirafa en ese caso... no sé por qué, no es alta. Pero seguí, y fue divertido como mi subconsciente en ese estado de relajación me traía automáticamente imágenes de animales según la persona que recordaba. Aparecieron un koala, un hipopótamo, una víbora, un caballo, una rata, sí, un cuervo, la jirafa, un cocodrilo, un burro, un perrete... Me sorprendió el automatismo, para muchas cosas vamos en modo automático. Mi reflexión es, cuántos de nuestros hábitos y decisiones podríamos cambiar si escuchamos ahí dentro, en silencio. Hasta la próxima.

DESARROLLO

4/17/20251 min leer

Acompaño a mi hija a conciliar el sueño, sí.

La guío con palabras susurrantes, a respirar, a relajarse, a dejarse llevar por el peso de sus párpados...

El caso es que a mí también me relaja, me induzco a un estado de profundo sosiego y en ocasiones se me ocurren cosas.

Un día pasé lista de algunas personas de mi círculo íntimo, del cercano, del periférico, etc.

Una de las personas la identifiqué sin querer con un animal, con una jirafa en ese caso... no sé por qué, no es alta.

Pero seguí, y fue divertido como mi subconsciente en ese estado de relajación me traía automáticamente imágenes de animales según la persona que recordaba.
Aparecieron un koala, un hipopótamo, una víbora, un caballo, una rata, sí, un cuervo, la jirafa, un cocodrilo, un burro, un perrete...

Me sorprendió el automatismo, para muchas cosas vamos en modo automático.

Mi reflexión es, cuántos de nuestros hábitos y decisiones podríamos cambiar si escuchamos ahí dentro, en silencio.

Hasta la próxima.